Una joven turca logra crear plástico con cáscara de plátano

06.07.2013 06:17

Una alumna turca de 16 años, Elif Bilgin,
ha sido premiada con el prestigioso
premio norteamericano 'Science in
Action' (Ciencia en Acción) por desarrollar
un innovador método de producir plástico
a partir de cáscaras de plátano, informa
hoy el diario turco 'Hürriyet'. El premio,
patrocinado por la revista estadounidense
'Scientific American' y anunciado ayer,
está dotado con 50.000 dólares y recayó en
Bilgin, que compitió con otros 14 jóvenes
de diferentes continentes.
Su proyecto se llama 'Going Bananas', un
juego de palabras que significa tanto
'Volverse loco' como 'Recurrir al plátano',
y explica en detalle cómo utilizar las
cáscaras del popular fruto en lugar de los
derivados de petróleo para producir
plástico. "El método que he diseñado es
tan simple que prácticamente lo puede
hacer uno en casa (algunos químicos son
irritantes pero no realmente peligrosos).
Todo el mundo puede usar ese plástico y
nuestro bello planeta se ahorrará las
consecuencias de la producción de
plástico con derivados del petróleo, como
la contaminación de aire, suelo y agua",
asegura Elif Bilgin en su proyecto.
La alumna, que estudia en un colegio de
Estambul para jóvenes especialmente
dotados, invirtió dos años en desarrollar
el método, comprando plátanos en el
mercado y macerando las cáscaras con
químicos diversos. Bilgin señala que el
bioplástico se produce normalmente a
partir de patatas, pero que la cáscara de
plátano es igualmente rica en almidón, y
además es uno de los desechos más
comunes de la industria alimentaria.
La joven investigadora hervía las cáscaras
para luego mezclar la pasta con pequeñas
cantidades de glicerina, sosa cáustica y
ácido clorhídrico, pero el plástico
resultante se descomponía al cabo de tres
días, por lo que siguió investigando.
Averiguó que colocando las cáscaras en
una solución de disulfito de sodio, un
antioxidante, antes de hervirlas, y
ajustando las cantidades usadas, el
plástico se mantenía inalterable y
resistente. Un primer uso, señala Bilgin,
podría ser como aislante para cables
eléctricos, pero también servirá para
prótesis médicas o estéticas, añade.
En una entrevista con 'Scientific
American', la joven señaló que toma como
modelo a Marie Curie, Premio Nobel de
Física y Química, por romper no sólo
moldes científicos al investigar la
radiactividad sino también sociales y
abrir nuevos caminos a las mujeres. El
premio, aparte del dinero, incluye un
viaje en septiembre a las oficinas del
gigante informático Google en California
(EEUU), donde Bilgin y otros jóvenes de
todas partes del mundo competirán por el
premio Google Science Fair, dotado con
100.000 dólares y diversas oportunidades
de formación científica