¿Se acerca el fin de Sony en el mercado de los móviles

07.03.2015 15:19

Es una de las marcas más conocidas entre los
consumidores de productos electrónicos.
Sony es la empresa que nos dejó el televisor
Trinitron, el reproductor portátil de casetes
(walkman), y la consola de juegos
PlayStation.
Y por supuesto, tiene una gran presencia en el
Mobile World Congress (Congreso Mundial
de la Telefonía Móvil), que tiene lugar en
Barcelona, España, y culmina el 5 de marzo.
Pero vale la pena hacerse una pregunta: ¿por
qué Sony sigue fabricando celulares?
Realmente, no está funcionando.
Sony produce móviles buenos y elegantes que
funcionan con el sistema operativo Android.
De hecho, una de las estrellas del evento
tecnológico en la edición de este año, Eric
Migicovsky, el fundador de los relojes
inteligentes Pebble Watch, me dijo que solo
muerto le quitarían su dispositivo Sony Xperia.
Sin impacto
En Barcelona, Sony lanzó al mercado otro
celular que se ve muy bien pero que no tiene
nada especial, así como una tableta súper
delgada.
Pero no ha logrado generar un verdadero
impacto en el mercado.
Cuando conversé con Kazuo Hirai, director de
Sony, en este mismo foro pero hace dos años,
se mostraba optimista al asegurar que la
empresa ocupaba el tercer lugar en el
mercado de los teléfonos inteligentes.
Incrementó su penetración en algunos países
europeos por un corto tiempo, pero según la
empresa estadounidense de análisis de
mercado, International Data Corporation, Sony
se encuentra en la categoría "otros" en las
estadísticas que reflejan la cuota de mercado.
Actualmente se encuentra detrás de Samsung
y Apple, a gran distancia, y ha sido
sobrepasada por tres compañías chinas.
Además, su división de teléfonos celulares es
un factor de peso en las grandes pérdidas que
ha reportado Sony.
Retos por delante
Así que, cuando me encontré de nuevo con
Hirai, con delicadeza le comenté que quizás
había llegado el momento de abandonar ese
segmento del mercado.
Pero él no estuvo de acuerdo, al menos por el
momento.
"Estamos en un ambiente dinámico y
competitivo que cambia con gran rapidez", me
dijo, admitiendo que, en algunas áreas, "no
pudimos mantener el ritmo".
Y agregó: "Necesitamos tener más cuidado
con el retorno de capital y con lo que la
competencia está haciendo… pero eso no
quiere decir que estemos fuera del negocio".
Sony también ha estado gastando dinero en
tecnología "usable" -prendas de vestir que
incorporan elementos tecnológicos- (wearable
technology), ha sacado a la venta relojes
inteligentes y brazaletes que registran
diferentes aspectos relacionados con la salud
sin analizar cuán exitosos han sido.
Hirai se refirió a su propio brazalete durante
nuestra entrevista, asegurando que le estaba
proporcionando una gran cantidad de
información útil, como por ejemplo, que los
miércoles en la noche nunca dormía bien.
(Me pregunto si los jueves es el día en el que
tiene que informarle a los accionistas cuánto
dinero han perdido en dispositivos que muy
pocos están comprando).
Falta de claridad
Pero Hirai argumenta que nadie ha logrado
conquistar el sector de las prendas de vestir
tecnológicas y que todavía "se está tratando
de descifrar cuál es el producto que le
interesa a los consumidores".
Después de haber probado el prototipo de
Sony Smart EyeGlass, lentes inteligentes que
muestran hologramas, puedo predecir con
confianza que ese producto no será el que
cautive a los compradores.
La tecnología que utiliza parece del año
pasado. Además, logra que los lentes de
Google Glass se vean elegantes.
Hace pocas semanas, Hirai reconoció
tácitamente que la tecnología móvil no era
fundamental para el futuro de Sony.
Para el ejecutivo, la división de la compañía
que se dedica al entretenimiento será el
motor que impulsará el crecimiento a futuro.
Sony Pictures puede haber sido una fuente de
bochorno hace pocos meses cuando un
ciberataque expuso muchos de sus secretos,
pero sigue siendo más fácil hacer dinero con
películas que con celulares.
Incertidumbre a futuro
En sus dos años en la cima, el amigable
director de Sony ha demostrado que puede ser
implacable cuando es necesario, y eso ha
permitido que el precio de las acciones se
recupere. No ha ocurrido lo mismo, sin
embargo, con las ganancias.
Le pregunté si podía asegurar que, en cinco
años, Sony seguiría estando en el negocio de
los teléfonos móviles.
"No hay garantía de que estemos en ningún
rubro en cinco años. Es la naturaleza del
sector electrónico", respondió.
Hace cinco años, Nokia y Blackberry eran dos
grandes en el mundo de los celulares.
Pero en este momento, una ya no existe, y la
otra, apenas se ve.
No nos sorprendamos entonces si Sony no
está presente en el Mobile World Congress
2020.