Rubén Blades denunció el “robo descarado” de las discográficas: se quedan con todo

12.07.2013 17:15

(Nueva York, 11 de julio. EFE).- El artista y
ex político Rubén Blades arremetió hoy
contra las discográficas porque “se
quedan con los discos de los artistas“,
lo que considera “uno de los robos más
descarados de la historia” y le ha
impulsado a grabar sus éxitos con la
compañía Fania para poder legar a su
familia los derechos.
“Si usted va a un banco y pide un
préstamo para comprar una casa, el
banco le deja la plata, usted le paga los
intereses y lo que le debe. Cuando usted
cubre el préstamo, la casa es suya.
Con los discos no “, explicó Blades en una
conferencia que dio hoy en Nueva York
en el marco de la Conferencia de Música
Latina Alternativa.
“La compañía avanza el dinero para hacer
el disco, nos quitaba la plata de las
regalías y cuando cubría el costo de la
inversión, el disco también era de la
compañía todavía “, ha seguido, con el
fin de argumentar uno de sus proyectos
profesionales: volver a grabar sus éxitos
de juventud bajo el sello de Fania para
tener en propiedad los derechos de
algunas de sus canciones más reclamadas.
“Lo estoy haciendo para ser dueño de
mis masters de Fania . Estoy
regrabándolo todo. Gracias a Dios tengo
voz para hacerlo. Cuando yo me muero le
dejo eso a mi familia y quien quiera podrá
tener el original que lo tendrá Fania, o la
gente que lo tenga ahora, y también yo lo
tengo”, explicó.
Blades, como otras de las estrellas de la
salsa que alumbró este sello discográfico,
lleva décadas con agrias polémicas a este
respecto con Fania, y este es su último
intento por recuperar la propiedad
intelectual de sus temas más famosos, los
que le convirtieron en abanderado de
la “salsa intelectual”.
“Hubo un momento en el que las
canciones eran sobre el amor, el amor, el
amor… o el tipo que me traicionó, sobre
‘tú vas a ver que yo te voy a agarrar’.
Nosotros empezamos a escribir sobre
otras cosas , y eso fue lo que hizo de
“Siembra” el primer disco en vender un
millón de copias en salsa. Lo compró todo
el mundo, no solo el que bailaba o el que
vive en el barrio. La moraleja “la vida te
da sorpresas” le pasa a todo el mundo”,
afirmó.
Y Blades, luchador y elocuente como ha
sido siempre, también tuvo palabras para
la política, ese oficio que quiso
desempeñar y le llevó a las elecciones por
la presidencia de Panamá en 1994 y a
ocupar el puesto de ministro de Turismo
en 2004.
“Una de las formas de acabar con la
corrupción es reemplazándola por algo
que sirva. A la gente se le pregunta ‘¿y
usted no entra a la política? Y contestan:
‘No eso es una mierda’. ¿Cómo vas a
cambiar la mierda, en qué lo vas a
transformar? “, preguntó.
“La cosa está podrida porque no
participamos . Así de simple. ¿Qué es
difícil? Difícil es vivir sabiendo que está
mal la cosa y no hacer nada”, concluyó.