Reclama un millón de dólares por pescar un pez enorme
El pescador Rodney Ply, un ex militar
norteamericano aficionado a la pesca, creyó
haber conseguido una captura que le
permitiría retirarse durante el resto de su
vida.
Sin embargo, lo que pescó —una lubina
gigante de más de treinta kilos de peso (la
media de la especie está en diez kilos y es
muy raro el ejemplar que supera los doce)—
parece haberse convertido en una fuente de
dolores de cabeza.
Según recoge la cadena de televisión
norteamericana ABC, tras registrar la captura
Ply solicitó a la International Game Fish
Association que le entregara el premio que
dicha organización pesquera otorga, según
las bases, «a todo aquel que capture un pez
que bata un récord mundial utilizando un
anzuelo de la marca Mustad —que patrocina
el concurso—».
No obstante, cuando la organización analizó
la captura de Ply, encontró indicios de que
este habría utilizado una herramienta
conocida como «spreader bar», que simula un
banco de peces, algo prohibido en las bases.
Ply, por su parte, asegura que lo que utilizó
fue «un señuelo casero que difícilmente
puede confundirse con una “spreader bar”».
«Es la típica historia de David contra
Goliath», asegura Eric Rudenberg, de
Rudenberg and Glasser, el buffete de
abogados que representa a Ply. «El señor Ply
es un veterano de guerra condecorado que
participó en una competición que le animaba
a cumplir el sueño de cualquier pescador:
capturar a un pez tan grande que permitiera
batir un récord mundial», añade su socio
Michael Glasser. «Siguió todas las reglas.
Ahora solo quiere que le den lo que le
prometieron».

