La maratón de Tokio se blinda al máximo ante la amenaza yihadista

20.02.2015 15:12

La Maratón de Tokio ha reforzado la
seguridad hasta límites inéditos de cara a
su celebración este domingo por la
amenaza terrorista del Estado Islámico
(EI), con medidas que incluyen decenas de
policías infiltrados en la carrera o la
prohibición de llevar bebidas no
precintadas.
La prueba se ha convertido en un primer
ensayo de seguridad con vistas a la
celebración de los Juegos Olímpicos que
Tokio acogerá en 2020 después de que en
las últimas semanas el EI secuestrara y
decapitara en Siria a dos japoneses y
amenazara con asesinar a ciudadanos
nipones “dondequiera que estén”.
Según explica la organización en su página
web, este año los 36.000 corredores solo
podrán traer botellas, latas o contenedores
de bebida que hayan sido adquiridos en
un comercio y no hayan sido abiertos o
desprecintados para evitar la posibilidad
de que un líquido pueda ser utilizado para
fabricar una bomba.
Además, la cantidad de líquido por
participante no podrá sobrepasar los 400
mililitros y cada contenedor o botella que
se traiga no podrá tener una capacidad
superior a los 200 mililitros.
Pese a estas limitaciones, la organización
ofrecerá como cada año bebidas en vasos
de papel dentro del recorrido.
Habrá seis accesos de seguridad (cuatro
más que en 2014) en los que se controlará
estrictamente que las bebidas cumplan
estas condiciones y en los que habrá 50
detectores de metales, 46 más que en la
edición del año pasado.
En estos accesos se harán cacheos
corporales y se registrarán todas las
mochilas de los participantes.
El personal destinado a seguridad estará
compuesto por 6.000 efectivos de empresas
privadas y 4.500 de la policía
metropolitana de Tokio.
Además 64 agentes correrán por primera
vez la carrera, según detalló a principios
de mes la policía metropolitana de la
capital nipona.
Los policías irán identificados como tales y
tendrán una cámara de pequeño tamaño
en el lateral de sus gorras que
transmitirán las imágenes en vivo a una
sala de control.
El número de cámaras de seguridad fijas
operadas por la organización ha pasado de
11 a 21 este año, a las que hay que sumar
otras 1.200 instaladas en las calles del
recorrido.